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Pulmones

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¿Qué son los Pulmones?

Los pulmones son estructuras anatómicas pertenecientes al sistema respiratorio, se ubican en la caja torácica, a ambos lados del mediastino. Debido al espacio ocupado por el corazón, el pulmón derecho es más grande que su homólogo izquierdo. Poseen tres caras; mediastínica, costal y diafragmática, lo irrigan las arterias bronquiales y las arterias pulmonares le llevan sangre para su oxigenación. Embriológicamente deriva del endodermo.

Los pulmones, como se ha mencionado anteriormente, están situados dentro del tórax y a ambos lados del corazón. Están protegidos por las costillas y separados el uno del otro por el mediastino. Están cubiertos por una doble membrana llamada pleura, entre ambas pleuras se forma una cavidad (cavidad pleural) que está ocupada por una fina lámina de líquido seroso.

La superficie de los pulmones es de color rosado durante la infancia y se va oscureciendo con el paso de los años, llegando a ser algo más grisácea en los adultos. El peso depende del sexo y del hemitórax que ocupen: el pulmón derecho pesa en promedio 600 gramos y el izquierdo 500 g.

Estas cifras son un poco inferiores en el caso de la mujer, debido al menor tamaño de la caja torácica, y algo superiores en el varón.​ Se describen en ambos pulmones un vértice o ápex correspondiente a su porción superior y una base o porción inferior que se apoya en el músculo diafragma.

Función de los pulmones

funciones de los pulmones

La función de los pulmones es realizar el intercambio gaseoso con la sangre. Para ello, los alvéolos están en estrecho contacto con los capilares. En los alvéolos se produce el paso de oxígeno desde el aire a la sangre y el paso de dióxido de carbono desde la sangre al aire.

El mecanismo de intercambio gaseoso del organismo con el exterior presenta dos etapas:

La ventilación pulmonar. Consiste en la inspiración o entrada de aire al interior de los alveolos. El aire entra activamente en los pulmones al dilatarse la caja torácica. La expiración, o salida de aire, se realiza pasivamente.

Proceso de difusión. Se produce el intercambio de gases entre el alveolo y la sangre. Se realiza debido a la diferente concentración de gases que hay entre el exterior y el interior de los alvéolos; por ello, el oxígeno pasa al interior de los alvéolos y el dióxido de carbono pasa al espacio muerto (conductos respiratorios).

Proceso de perfusión. Es el paso de sangre por el capilar. Esta sangre va a ser la que se oxigene y, más tarde, vuelva al corazón.

Cuando la sangre llega a los pulmones tiene un alto contenido en dióxido de carbono y un bajo contenido en oxígeno. El oxígeno pasa por difusión a través de las paredes alveolares y de los capilares a la sangre. Allí es transportado por la hemoglobina, que lo llevará hasta las células del cuerpo donde por el mismo proceso de difusión pasará al interior de las mismas para su posterior uso.

El mecanismo de intercambio de dióxido de carbono es semejante, pero en sentido contrario, pasando el dióxido de carbono a los alvéolos. El dióxido de carbono, se transporta una parte disuelto en el plasma sanguíneo y otra parte lo transporta los glóbulos rojos.

Circulación pulmonar

Los pulmones tienen dos sistemas circulatorios: funcional y nutricional. El funcional, o sistema circulatorio pulmonar está comprendido por dos arterias pulmonares y por cuatro venas pulmonares. Las arterias pulmonares se originan del tronco pulmonar. Estas transmiten sangre desoxigenada del ventrículo derecho a los pulmones.

Se dividen en vasos más pequeños y finalmente en capilares pulmonares, alcanzando la superficie respiratoria de los pulmones. Por otro lado, las venas pulmonares izquierdas y derecha llevan sangre oxigenada de los pulmones a la aurícula izquierda del corazón.

Podrías pensar que hemos cometido un error diciendo que las arterias llevan sangre desoxigenada y las venas oxigenadas, pero no, no nos equivocamos. Ese es el truco; aunque la definición más amplia de arteria, es un vaso que transporta sangre oxigenada desde el corazón hasta la periferia, y una vena es un vaso que lleva sangre desoxigenada desde la periferia de regreso al corazón.

Tenemos este caso único en la circulación pulmonar, donde las arterias llevan sangre desoxigenada y las venas sangre oxigenada. Esta parte de la circulación es llamada funcional porque no está destinada al suministro nutricional del tejido pulmonar, sino que es responsable por el proceso de intercambio gaseoso de oxígeno y dióxido de carbono en los pulmones.

Las arterias bronquiales suministran oxígeno al tejido pulmonar, colaborando con la función primaria que es el intercambio gaseoso. Generalmente, las arterias del árbol bronquial son ramas de la aorta torácica; una arteria bronquial derecha, y dos arterias bronquiales izquierdas.

Las ramas bronquiales adicionales (conocidas como arterias bronquiales superiores) pueden ser ramas de la arteria subclavia y/o arterias torácicas internas; sin embargo, no es muy común. Por otra parte, las venas bronquiales drenan el tejido pulmonar en la aurícula derecha por las venas pulmonares o ácigos.

Enfermedades de los pulmones

Las enfermedades del pulmón pueden ser congénitas o desarrollarse a lo largo de la vida. Algunas de las más frecuentes son la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, causada mayoritariamente por la inhalación del humo de tabaco, el asma bronquial provocado frecuentemente por alergia al polen u otras sustancias, la neumonía y bronconeumonía debida a la proliferación de bacterias o virus patógenos en los alveolos pulmonares, el cáncer de pulmón también muy relacionado con el tabaquismo y la tuberculosis pulmonar muy frecuente en determinados países y asociada tradicionalmente a la desnutrición, la pobreza, hacinamiento y malas condiciones de vida.

Te dejamos un vídeo interactivo en el que se muestra información sobre los Pulmones.